Lavamos y picamos en rodajas las berenjenas con un grosor aproximado de 5mm.

Luego le untamos sal por ambos lados de cada una de las rodajas y dejamos reposar 15 o 30 minutos.

Pasado ese tiempo las secamos bien con un papel de cocina que absorberá el líquido oscuro que ha soltado y el exceso de sal.

A continuación, mezclamos el aceite con el perejil, el orégano, la pimienta y el ajo en polvo y vertemos sobre las rodajas de berenjenas ya secas.

Encendemos la plancha con la temperatura media alta y cuando esté caliente colocamos las berenjenas y cocinamos por 2 o 3 minutos de cada lado hasta que estén doradas y con las marcas de la plancha bien definidas.

Y así ya estará lista nuestra berenjena a la plancha para disfrutar en acompañamiento de cualquier patillo que nos guste, pues va muy bien con casi todo.