Cómo Almacenar Correctamente las Fresas para Maximizar su Frescura

Tener unas ricas y jugosas fresas frescas en la nevera es increíble, más aún si puedes utilizarlas en alguna deliciosa receta.

Comprarlas nos da placer porque son realmente buenas, muy frescas pero una vez que las llevas a casa te das cuenta que al pasar unos días comienzan a descomponerse y es algo que no es para nada bonito.

Por ello hoy quiero ayudarte con estos consejos que voy a darte, para que la próxima vez que compres fresas sepas cómo conservarlas adecuadamente, sacarles el máximo provecho y que siempre se encuentren frescas.

¿Cómo Conservar las fresas en la nevera?

Las fresas bien almacenadas se preservan en buen estado por aproximadamente 3 semanas dentro de la nevera. Para conservar las fresas en la nevera deberás tener en cuenta los métodos que te voy a continuación:

• Coloca las fresas a un recipiente de vidrio que posea cerradura hermética, no las laves, cierra y sella el recipiente y llévalo a la nevera.
• Otra variante es introducir una toalla de papel seca y limpia en un recipiente y luego colocar las fresas encima de la toalla sin lavarlas. Cierra el recipiente y guardarlo en el refrigerador.
• Un método también eficaz es sumergir las fresas por unos minutos en una solución de vinagre, mezclando tres partes de agua con una de vinagre blanco. Retirarlos de la solución con vinagre, escurre y seca bien las fresas para luego transferirlas a un recipiente de vidrio en el previamente has introducido una toalla de papel. Cierra el recipiente con la tapa sin apretarla y colócalo en la nevera.

Almacenar las fresas cortadas

Si prefieres tener las fresas ya cortadas y listas para usar en cual receta, lo que deberás hacer para conservarlas correctamente es usar cualquiera de las técnicas que te comenté anteriormente. Aunque debo decirte que una vez cortadas su vida útil de 3 o 4 días para ser exactos, mucho menos que si se conservan enteras y sin lavar. Otra variante es envolverlas bien con papel de aluminio o con una cobertura de plástico.

¿Cómo Congelar fresas?

Las fresas se pueden congelar en cualquier formato y presentación ya sea enteras, cortadas, o trituradas. Esta variante de conservación de la fresa es ideal para que luego puedas utilizar en recetas muy diversas y alcanzan una vida útil de 10 a 12 meses. Congelar las fresas precortadas colocándolas en una bandeja previamente forrada con papel encerado. Congela de esta forma durante unas horas solamente y luego transferirlas a un recipiente o una bolsa con cerradura hermética.

Al descongelar las fresas estas van a tener una textura más suave y un color ligeramente más oscuro y puedes hacerlo dejándolas en la nevera por varias horas, introduciéndose en un recipiente y este a su vez este dentro de otro con agua fría y dejarlas así de 15 a 30 minutos aproximadamente. También puedes sumergirlas en agua unos 15 minutos y las tendrás listas para usar cualquier receta.

Otras formas de conservar las fresas

Para este método bate las fresas y hazlas puré, vierte el puré en un frasco de vidrio y consérvalo en la nevera de 3 a 5 días. Si deseas conservar el puré por más tiempo congelarlo y alcanzará una vida útil de hasta 3 meses. Podrás descongelarlo dejándolo en la nevera la noche antes de usarlo o utilizar el microondas calentando unos 20 a 30 segundos y listo para consumir.

Enlatadas: Una de las técnicas más comúnmente conocidas para conservar la fresa es enlatando. De esta forma la tienes lista siempre para utilizarla en diversas recetas y elaboraciones y se encontraran en buen estado durante todo el año.

Para llevar a cabo este método lo primero es seleccionar y elegir fresas frescas y sin deterioro visible.

Para enlatar las fresas puedes hacerlo con o sin azúcar, esto es algo a tu elección y como más te guste. Aunque no es necesario realmente añadir el componente dulce y solo es una cuestión de gusto individual de cada consumidor el azúcar ayuda a conservar el color, la textura y el sabor de la fresa. Para enlatar y conservar la fresa de este modo con azúcar haz lo siguiente:

• Lava bien las fresas, córtala y retira los tallos.
• Colócalas en un tazón de buen tamaño y esparcir azúcar por encima, exactamente 3/4 de taza de azúcar blanca. Resuélvelas y asegúrate de que todas queden uniformemente cubiertas con el azúcar. Cubre el tazón y deja reposar en la nevera por unas 6 horas para que se maceren.
• Transfiere las fresas maceradas a una olla y calienta a fuego medio bajo, remueve ocasionalmente y hasta que todo esté bien caliente y el azúcar se haya derretido.
• Vierte el contenido de la olla en un recipiente de un cuarto de galón previamente calentado en el horno, ayúdate de un embudo al hacer este paso.
• Vierte los jugos una vez que tengas el recipiente casi completamente lleno de fresas. Deja alrededor de ½ pulgada de espacio en la parte superior. Limpia los bordes y tapa el frasco sin apretar.
• Coloca el frasco en una olla con agua hirviendo, dejándolo así unos 15 minutos.
• Retira el frasco del agua una vez haya terminado el paso anterior y deja reposar sobre una toalla de cocina para que se refresque por completo. Deja enfriar por 24 horas y luego estará listo para disfrutar.

Con estos consejos y recomendaciones fáciles tendrás siempre fresas frescas e increíbles para utilizar en cualquier elaboración.