En un tazón mediano, mezcla el ajo, el jengibre, las hojuelas de pimiento rojo, la miel o azúcar morena, la salsa de soja, la salsa Worcestershire y el agua.

Agrega las tiras de carne y mezcla bien. Cubre y refrigera por al menos 2 horas, removiendo ocasionalmente. Puedes marinar hasta 24 horas para un sabor más intenso.

Calienta 1 cucharada de aceite en un sartén grande o wok a fuego medio-alto.

Agrega los pimientos y la cebolla, y saltea durante 5 minutos hasta que estén tiernos pero aún crujientes.

Retira los vegetales y resérvalos en un plato.

Retira la carne de la marinada y reserva el líquido.

Añade la otra cucharada de aceite a la sartén y caliéntala a fuego medio-alto.

Extiende la carne en una sola capa y deja cocinar 1 minuto sin moverla. Luego, remueve y cocina por 2-3 minutos más, hasta que esté bien dorada.

Retira la carne y agrégala al plato con los vegetales.

Agrega la fécula de maíz a la marinada reservada y mezcla bien.

Vierte la marinada en la sartén y deja hervir por 2 minutos, removiendo hasta que espese.

Reduce el fuego a medio y vuelve a agregar la carne y los vegetales a la sartén.

Mezcla bien y cocina por 1-2 minutos más hasta que todo esté bien caliente y cubierto con la salsa.

Retira del fuego y transfiere a una fuente.

Decora con semillas de sésamo y cebolla verde picada.

Sirve caliente con arroz, fideos o tu guarnición favorita.