Precalentar horno: Precalienta el horno a 180°C.
Prepara el salmón: Lava y seca el salmón con papel de cocina. Rellena su cavidad interna con rodajas de limón, hinojo, mejorana, perejil y cebollino para un aroma y sabor frescos.
Prepara la mezcla de sal: En un tazón grande, combina la sal gema, los huevos y 250 ml de agua. Mezcla bien. Extiende 1/3 de la mezcla en una bandeja para horno, formando una capa uniforme con un hueco en el centro para colocar el salmón.
Cubre el salmón con sal: Coloca el salmón en el hueco de la bandeja y vierte el resto de la mezcla de sal sobre él, cubriendo completamente y asegurando una capa de al menos 2 cm de grosor alrededor.
Hornea: Cocina el salmón en el horno a 180°C durante 35 minutos.
Reposo: Al terminar la cocción, deja reposar el salmón en su costra de sal por 1 hora para que los jugos se asienten.
Prepara la salsa de yogur de albahaca: En una licuadora, mezcla las hojas de albahaca, la mitad del yogur, mostaza y jugo de limón. Procesa hasta obtener una consistencia suave, luego añade el resto del yogur, un chorrito de aceite de oliva, sal y pimienta al gusto.
Salsa de menta y chile: Pica finamente los chiles y las hojas de menta. En un tazón, mezcla con 2 cucharadas de vinagre, 2 cucharadas de aceite de oliva, sal y pimienta.
Servir: Rompe con cuidado la costra de sal y retira el exceso. Transfiere el salmón a una fuente, retirando la piel para dejar la carne rosada y jugosa. Sírvelo con rodajas de limón, la salsa de yogur y la mezcla de menta y chile. ¡Disfrútalo!