Combina en un bol grande la harina, el azúcar glas y la sal.

Agrega la mantequilla fría en cubos pequeños y mezcla con las manos o un procesador hasta lograr una textura arenosa.

Incorpora el huevo y mezcla hasta formar una masa homogénea. Envuelve en plástico film y refrigera durante 30 minutos.

Con un rodillo, extiende la masa entre dos hojas de papel encerado hasta alcanzar un grosor de 3-5 mm. Colócala en un molde ondulado desmontable previamente engrasado, recorta los excesos y refrigera por 1 hora.

Separa las nueces enteras para decorar y pica finamente el resto.

Combina los azúcares, la vainilla, la canela, la sal y la mantequilla derretida en un bol grande hasta obtener una pasta. Agrega los huevos uno por uno, mezclando bien. Incorpora la harina y el jarabe de maíz poco a poco. Finalmente, añade las nueces picadas.

Vierte el relleno en la base de la masa sucre. Decora con las nueces enteras colocándolas uniformemente sobre la superficie.

Precalienta el horno a 180 °C (350 °F) y hornea durante 70 minutos o hasta que el relleno esté firme.

Deja enfriar completamente antes de desmoldar.

Barniza con brillo neutro para un toque profesional.

Espolvorea azúcar glas con un colador para un efecto decorativo.