Galleta de Bananas y Avena

Las Galletas de banana y avena es una deliciosa receta de la cocina internacional. Sin gluten, sin huevos, sin azúcar, resultan muy saludables y una buena opción para las personas celíacas.

Es una receta fácil de hacer, solo lleva dos ingredientes básicos, plátano y avena, aunque puedes añadir otros ingredientes para hacer más agradable su sabor.

Si tienes antojos de comer alguna golosina, te aseguro que las Galletas de banana y avena alegrarán tu paladar.

Son maravillosas en el desayuno, te darán energías para comenzar tu jornada y si tienes niños los harás muy felices con estas riquísimas galletas. 

Las Galletas de banana y avena ofrecen muchos beneficios para la salud, te invito entonces a que las prepares y que conozcas sus propiedades nutricionales.  

¿Cómo elaborar Galletas de bananas y avena?

Para que tus Galletas de bananas y avena te queden exquisitas sigue estas recomendaciones:

• Pon a precalentar el horno de 10 a 15 minutos antes de colocar las galletas.
• Pasa por un colador el polvo para hornear, la canela y la sal para eliminar los grumos.
• Si deseas que tus galletas estén más dulces añade una cucharadita de miel.
• Agrega arándanos, pasas o trocitos de chocolate para darles mejor sabor.

¿Cuál es el origen de las Galletas de bananas y avena?

Las Galletas de bananas y avena son una variante más saludable de las Galletas de avena; aunque no se conoce con precisión quién las inventó.

Las Galletas de avena se originaron en Escocia durante el siglo XIX, época en la que la avena era utilizada en diversas preparaciones, aunque en esta época gozaban de popularidad en Europa central, Gran Bretaña y Escandinavia.

La receta de Galletas de avena en la actualidad cuenta con diversas variantes, pero sin dudas la que hoy nos ocupa es de las más sencilla y saludable.

¿Cuáles son los aportes nutricionales de las Galletas de bananas y avena?

Seguro ya estás pensando en preparar unas Galletas de bananas y avena, son tan fáciles de hacer que en pocos minutos puedes disfrutarlas.

Pero no solo son deliciosas, sus ingredientes principales aportan numerosos beneficios para la salud.

La avena es un cereal rico en vitamina B1, vitamina B6, ácido fólico, hierro, magnesio, zinc, fibras, proteínas y grasas.

La avena contribuye al buen funcionamiento del sistema nervioso y del corazón, reduce los niveles de azúcar en la sangre y el colesterol malo, de igual manera ayuda al buen funcionamiento del sistema inmunológico, favorece la digestión y previene la anemia.

Por su parte, la banana o plátano es una fruta nutritiva muy recomendada por los médicos para los niños, las personas que practican deportes y los adultos en sentido general.

La banana contiene vitaminas C y B6, necesarias para proteger a las células de los radicales libres. Además, contiene minerales como el hierro, el potasio, el magnesio y el manganeso.

La banana evita la retención de líquidos, reduce  la acidez y aumenta la capacidad de resistencia.

Es fuente de carbohidratos por lo que aportan energías, es a su vez importante para el mantenimiento de los músculos.

Por su alto contenido de potasio y su bajo contenido de sodio, ayuda a la estabilidad de la presión arterial.

Reduce la sensación de fatiga, previene los calambres, por ello es un alimento ideal para los deportistas y las personas que realizan ejercicios físicos.

Ayuda a prevenir la anemia; por su contenido de triptófano estimula el sistema nervioso y evita la depresión.

Ayuda a regular el tránsito intestinal y mejora el estreñimiento.

Produce efecto antiácido en el estómago por lo que es recomendado para las personas que padecen de acidez o reflujo.