Lubina a la Sal

La lubina a la sal es una de esas recetas que, aunque parece sofisticada, es sorprendentemente sencilla de hacer. 

Gracias a la costra de sal, el pescado se cocina en su propio jugo, resultando en una carne jugosa, tierna y con un aroma espectacular gracias a las hierbas frescas. Este plato es ideal para cenas o almuerzos en los que quieres impresionar sin mucho esfuerzo.

¿Con qué Acompañar la Lubina a la Sal?

Este plato combina muy bien con guarniciones sencillas que resalten su sabor. Algunas opciones deliciosas incluyen:

• Patatas asadas o hervidas: Ambas opciones son un clásico que complementa bien la textura suave del pescado.
• Ensalada verde: Acompaña con una vinagreta de mostaza para añadir un toque de frescura y acidez.
• Salsas ligeras: Prueba una crema de aceite de oliva y limón o una salsa holandesa, ideales para realzar el sabor de la lubina sin opacarlo.

Ideal para Todo el Año

La lubina a la sal es una excelente elección para celebraciones especiales, cenas navideñas, o incluso una cena romántica. 

Este plato siempre se luce, y con una presentación simple pero elegante, hará que tus invitados se sientan en un restaurante de alta cocina.